Para reflexionar

Sin lugar a dudas no hay nada de bueno para rescatar en la primera fecha en la A del torneo clausura.

Antes de que suceda una situación como ésta, no se debe pensar en forma individual sino en el grupo y por aquellos que llevaron adelante y organizaron este proyecto, poniendo la cara por TODOS, inscribiendo al equipo en una liga en donde fuimos invitados a participar y no se puede manchar el nombre como se lo hizo.

No hay nada que justifique la reacción de algunos de los jugadores pilarenses, ni siquiera

la espantosa actuación del árbitro que no supo conducir el partido por riendas normales, imponiendo el “siga siga”, sin sacar tarjetas amarillas ante las reiteradas faltas durante el cotejo y en un instante despacharse con cuatro tarjetas coloradas para Pilarenses y cuatro expulsiones para el rival (un padre, un tío y vaya a saber quién más) ante la escaramuza en donde ambos equipos participaron.

Tampoco lo justifica el ingreso de personas que acompañaban al equipo rival a agredir a jugadores de nuestro equipo, situación que amerita el descuento de puntos a Los Mágicos según el artículo 3 (tres) de la Liga: “Los equipos participantes son responsables del buen comportamiento de sus jugadores como de sus hinchas dentro de los predios en donde se disputan los partidos, si ocasionaran daños, agresión verbal o disturbios durante y/o finalizados sus partidos, pueden ser sancionados económicamente, con quita de puntos y hasta prohibírseles la entrada al complejo”.

A todo esto analicemos cuál fue la causa de la finalización del partido.

Opción 1 (dicha por el árbitro): porque nuestro equipo no contaba con la cantidad suficiente de jugadores para continuarlo. Pero cómo? Nos expulsaron cuatro, y la regla dice que se debe tener no menos de 7, por lo que el árbitro ignora el reglamento o para él 11-4 es igual a 6. Las dos interpretaciones son altamente probables.

Opción 2: que el cotejo se haya finalizado por el artículo 20 de la liga en donde dice: “Si un Partido es Suspendido por Agresión mutua de Jugadores, se le dará por perdido el partido a los dos equipos 0 – 2, mas la sanción correspondiente a los jugadores involucrados.”

Igualmente no daba para seguir un partido totalmente desvirtuado en donde las sanciones deben ser para ambos equipos, con quita de puntos para Los Mágicos por el ingreso de gente ajena al partido y que no tenía nada que hacer dentro de la cancha agrediendo a varios jugadores.

Nada positivo para rescatar, solo reflexionar. Pasó una vez, no hay lugar para otra.